La tecnología que refuerza el control de edad en el tabaco
El sector avanza hacia soluciones tecnológicas que facilitan la verificación de edad y refuerzan el compromiso con la venta responsable.
La tecnología avanza rápido. Y esta vez no lo hace para vender más, sino para proteger mejor. En el sector del tabaco y los artículos regulados, las compañías están desarrollando sistemas de verificación de edad diseñados para reforzar el control y evitar el acceso de menores a productos sensibles.
Una tendencia que marca el rumbo del mercado: más control, más rigor y más confianza.
De la obligación al compromiso
Comprobar la edad siempre ha sido una obligación. Pero ahora se ha convertido también en una seña de responsabilidad activa.
Las nuevas herramientas permiten verificar la edad en segundos, sin incomodar al cliente adulto. Utilizan inteligencia artificial para estimar la edad de la persona que se aproxima al punto de venta o a la máquina expendedora.
No se trata solo de cumplir, sino de demostrar compromiso con un control responsable y eficaz. En un entorno donde la confianza lo es todo, la tecnología se ha convertido en el mejor aliado.
Precisión por encima del 98 %
Los sistemas más avanzados combinan cámaras, algoritmos y aprendizaje automático. Analizan rasgos faciales y estiman la edad con una precisión superior al 98 %, sin almacenar imágenes ni datos personales.
Cuando el resultado no cumple los parámetros legales, el sistema bloquea el acceso o avisa automáticamente al personal. Todo ocurre en milésimas de segundo.
El objetivo es claro: reforzar el acceso exclusivamente adulto con un control más objetivo y difícil de eludir.
Un apoyo útil para el canal regulado
Estas innovaciones no suponen un cambio de normas, sino una ayuda práctica para cumplirlas mejor.
Permiten reforzar el control de edad, prevenir errores y ahorrar tiempo en la gestión diaria. Además, ofrecen un respaldo objetivo ante inspecciones y contribuyen a reforzar la imagen de profesionalidad del punto de venta.
La tecnología convierte una obligación de siempre en un proceso más ágil, preciso y seguro.
Innovar también es facilitar
La venta responsable no consiste solo en cumplir la ley, sino en hacerlo de forma más eficiente.
El futuro del canal regulado pasa por aprovechar la tecnología para simplificar tareas, minimizar riesgos y reforzar la confianza del consumidor adulto.
Porque innovar no siempre es vender más.
A veces, innovar es optimizar.








