Hoy queremos hacernos partícipes de la denuncia que un estanquero de Madrid nos envía por email. La verdad, después de lo que el comisionado aprieta nos parece increíble que no se auto-aplique el mismo rasero.
El caso es el siguiente:
Durante más de 2 años estuve buscando locales para hacer un cambio de ubicación. Hubo locales que descarté por no cumplir los requisitos que el Comisionado exige en cuanto a distancias.
En abril de 2018 encuentro un local que cumple todas las especificaciones requeridas. Encargo el proyecto a un arquitecto técnico. Presento la solicitud de cambio de ubicación ante el Comisionado de Tabacos el 7 de mayo de 2018. En ese momento me entero de que se va a producir una apertura de un estanco a escasos metros de la ubicación por mí elegida. Yo descarté con anterioridad el local donde se iba a establecer este estanco, por incumplir la distancia mínima exigida a un centro educativo.
El 18 de mayo de 2018 presento ante el Comisionado un escrito adjuntando un certificado de distancias firmado por un arquitecto técnico explicando la ilegalidad de esa ubicación. Después de este escrito han venido otros muchos. Desde el Comisionado no contestan los escritos, no atienden por teléfono, no reciben visitas….
En el mes de noviembre el cambio de ubicación solicitado en mayo fue denegado, porque el otro estanco ya había abierto sus puertas en el local que incumple la distancia mínima de 100 mts. a un centro educativo y está a escasos metros del que yo había elegido. Ni tan siquiera soy considerado persona interesada en el proceso por parte del Comisionado.
El resumen es que llevo un año pagando dos locales, pagando minutas de arquitectos dejando de vender la cantidad de tabaco adecuada, perdiendo tiempo, dinero y esfuerzo en abogados , con una sensación infinita de desamparo, es como si fuese invisible. En cambio, los estanqueros ubicados en un local que incumple las especificaciones exigidas están lucrándose a costa de mi problema. No sabemos a quién recurrir, estamos indefensos y desamparados ante un muro de opacidad.
Soy consciente de que es difícil de entender, ni yo mismo lo entiendo: que el propio Comisionado tenga que exigir unas reglas estrictas fijadas por la normativa vigente, que se las salte sin problema, y que cuando la situación se denuncia, se hagan oídos sordos y se mire a otro lado dando largas y dejando pasar el tiempo que lo a único que lleva es a la ruina y desesperación de una familia.