Descubre cómo los ciberdelincuentes ponen el foco en los autónomos españoles y aprende estrategias para proteger tu negocio de esta amenaza creciente
España se ha convertido en el cuarto país europeo con más víctimas de ciberchantaje, una tendencia que está afectando severamente a las pymes y autónomos. Según informes recientes, el ciberchantaje ha crecido alarmantemente, especialmente entre los pequeños negocios que carecen de medidas robustas de seguridad.
La ciberextorsión: Una amenaza en ascenso
La ciberextorsión se ha consolidado como una de las amenazas digitales de mayor crecimiento para las pymes y autónomos. Este segmento ya representa un tercio de las víctimas anuales de ciberchantaje. Han aumentado un 77% el número de víctimas registradas en los últimos 12 meses, y se estima que la magnitud real del problema podría ser aún mayor.
¿Por qué los pequeños negocios son un blanco fácil?
Los ciberdelincuentes prefieren atacar a pequeñas empresas debido a su menor protección digital. La mayoría de los pequeños negocios no cuentan con medidas de seguridad adecuadas, lo que los convierte en blancos rentables para los criminales. Este fenómeno, descrito como “cosecha indiscriminada”, muestra cómo los ciberdelincuentes atacan en masa, aprovechándose de las vulnerabilidades tecnológicas y humanas.
El ciberchantaje y sus tácticas
El objetivo de la ciberextorsión no es solo robar información, sino también forzar a las empresas a pagar por la recuperación de sus datos o para evitar la divulgación de información sensible. Los ciberdelincuentes utilizan diversas técnicas para acceder a los sistemas de los negocios, incluyendo el phishing y el vishing.
- Phishing: Una de las técnicas más comunes es el phishing, donde los delincuentes engañan a los usuarios para que revelen sus datos de acceso. También utilizan contraseñas robadas para obtener acceso inicial. En el caso de los estancos, también se dan muchos casos con tarjetas de prepago que consiguen activar antes de abonar y la estafa se salda con miles de euros perdidos.
- Malvertising: Otra táctica es el SEO poisoning o campañas de malvertising, donde los atacantes usan plataformas de publicidad legítima para distribuir programas infectados. Las víctimas, al buscar software o servicios en línea, pueden ser redirigidas a versiones modificadas de aplicaciones, comprometiendo sus sistemas. En este caso hay que vigilar con cualquier email que parezca de un proveedor de confianza (como puede ser Correos, la Agencia Tributaria o una marca de tabaco) que incluya un link o documento adjunto fraudulento.
Estrategias para protegerse del ciberchantaje
- Uso de contraseñas seguras: Utilizar contraseñas fuertes y únicas para cada cuenta es fundamental. Los gestores de contraseñas pueden simplificar este proceso y aumentar la seguridad. Además, activar la autenticación multifactor (MFA) es una medida crucial para dificultar el acceso no autorizado.
- Actualización de software: Mantener el software actualizado es vital. Configurar actualizaciones automáticas para todas las aplicaciones y sistemas operativos asegura que siempre se esté utilizando la versión más segura.
- Educación y concienciación: La falta de concienciación en seguridad digital es un problema crítico. Es importante que los pequeños negocios y autónomos se eduquen y formen en este ámbito para poder identificar y prevenir ataques.
- Copias de seguridad: Realizar copias de seguridad regulares y cifradas de los datos críticos es esencial. Estas copias deben almacenarse en ubicaciones seguras, como dispositivos externos o servicios en la nube.
- Medidas de seguridad básicas: Instalar antivirus y firewalls en todos los dispositivos de trabajo es una medida básica pero efectiva. Además, es crucial saber qué hacer ante comportamientos sospechosos del ordenador o correos electrónicos fraudulentos.
Conclusión
Los últimos informes destacan una tendencia preocupante en el aumento de ciberchantajes contra pequeños negocios en España. Sin embargo, con medidas adecuadas y una mayor concienciación en seguridad digital, los autónomos pueden protegerse mejor contra estas amenazas. No podemos subestimar la importancia de la ciberseguridad en el entorno empresarial actual.