La industria del cáñamo ha conseguido, finalmente, abrir las puertas del Congreso de los Diputados con una proposición no de ley para regular el cánnabis. Una amplia mayoría aprobó la propuesta presentada por los partidos Unidas Podemos, ERC, y Bildu, mientras nuestro sector sigue mirando hacia otro lado.
El Gobierno deberá enfrentarse, ahora sí, a la primera propuesta parlamentaria que consigue abrirse camino en España para regular algunos aspectos del cáñamo y el cánnabis no psicoactivo. Era cuestión de tiempo, siempre lo hemos dicho. No se puede navegar eternamente contra viento y marea. Sin ir más lejos, Europa —la nuestra, la comunitaria— ha aumentado este 2023 el umbral del THC hasta el 0,3 %. Ese es el camino.
La proposición no de ley presentada por los grupos parlamentarios Republicano, Bildu, y Confederal de Unidas Podemos, relativa a «promover una regulación del cáñamo con fines industriales y el cánnabis no psicoactivo que proteja a las personas cultivadoras, transformadoras, comercializadoras y usuarias», se debatió ampliamente en la Comisión de Agricultura, Pesca y Alimentación del 22 de marzo. Nos percatamos de que no se mencionó a los estancos para nada. Normal. Muy normal, puesto que la iniciativa ha sido impulsada por el Cannabis Hub. La industria no pierde el tiempo.
¿Y qué hace mientras tanto el Comisionado para el Mercado de Tabacos para abogar a favor de los suyos, los estancos? Nada. No hace nada. Y no solo eso, sino que además pone trabas con circulares ambiguas e inspecciones sin fundamento. ¿Qué le pasa al Comisionado? ¿acaso está ciego? Ahora que se está tramitando la nueva Ley del tabaco, ¿tiene en cuenta que este producto de hierbas para fumar, tarde o temprano va a hacerse un hueco legal en nuestra sociedad? Como no espabilemos, se nos llevan el negocio, y eso no se lo podemos permitir.
Si os apetece leer todo el debate que hubo en las Cortes Generales sobre la propuesta, aquí os dejamos el enlace (pág. 23)