¿Vapear triplica las posibilidades de dejar de fumar?

Un curioso estudio australiano revela que el vapeo funciona tres veces mejor que el chicle en un tipo de fumadores determinado.

El vapeo no es magia, pero casi. Los datos son claros: funciona mejor que cualquiera de los otros métodos. Mucho mejor.

¿Y si el vapeo fuera la vía más efectiva para dejar el tabaco?

Un nuevo estudio en Australia ha encendido las alarmas… pero de esperanza.

Vapear triplica las tasas de abandono entre fumadores que buscan dejar el cigarrillo.

No es un titular llamativo sin más. Es ciencia.

Chicle de nicotina vs vapeo: el duelo que nadie esperaba

El ensayo, realizado por la Universidad de Nueva Gales del Sur, analizó a más de 1.000 fumadores diarios con pocos recursos.

Todos recibían ayuda financiera del gobierno.

A unos se les dio chicle o pastillas de nicotina, y a otros, vaporizadores de nicotina.

Durante ocho semanas, además, recibieron mensajes motivacionales por SMS.

Nada de clínicas, ni terapias imposibles: un enfoque realista y cercano.

Los números que hablan (y convencen)

Pasados seis meses, los resultados fueron claros:

• 28,4 % de los vapeadores dejaron de fumar.

• Solo 9,6 % lo logró con chicles o pastillas.

La diferencia es tan grande que no admite dudas: el vapeo ayuda mucho más a dejar el tabaco… al menos en este perfil de fumadores.

Pero ojo: muchos siguen vapeando tras dejar de fumar

El estudio también advierte de algo importante.

El 58 % de los exfumadores seguía vapeando al cabo de seis meses.

¿El motivo? No siempre es fácil cortar por lo sano.

El vapeo puede ser una transición, no la meta final.

Hace falta acompañamiento para cerrar el círculo.

La clave: libertad de elegir sabor y dispositivo

Un detalle curioso del estudio fue el enfoque realista.

Los participantes elegían su propio vapeador y el sabor del e-líquido.

Y eso, según los investigadores, mejoró el compromiso.

No se trataba de imponer, sino de ayudar.

Cuanto más adaptado al usuario, más probabilidades de éxito.

¿Significa esto que el vapeo es la solución?

Quizá no para todo el mundo. Pero sí es una herramienta poderosa, sobre todo si se usa con cabeza.

Más efectiva que lo tradicional.

Más atractiva para quienes quieren dejar el tabaco sin sentirse en una clínica.

Una vez más, el vapeo demuestra ser más una puerta de salida que de entrada al tabaco. Los datos están ahí. Ignorarlos ya no es una opción.