La prohibición de fumar en terrazas amenaza la hostelería. Descubre por qué Emilio Gallego califica esta medida como excesiva y perjudicial.
Emilio Gallego, secretario general de Hostelería de España, no se anda con rodeos. La prohibición de fumar en terrazas es, según él, una medida «excesiva» que afectará gravemente a bares y restaurantes en España.
Un golpe económico en un momento delicado
La hostelería, un sector clave para la economía española, aún se recupera tras el duro golpe de la pandemia. Y justo ahora, cuando el consumo se ha estancado, llega una nueva amenaza: la posible prohibición de fumar en terrazas. Emilio Gallego lo deja claro: “Es una medida excesiva y mal pensada, especialmente en un momento de incertidumbre económica”. Esta regulación podría reducir la afluencia de clientes, lo que llevaría a una caída del consumo, afectando a miles de establecimientos en todo el país.
La hostelería: Más que un negocio, un espacio de convivencia
Para muchos, la hostelería no es solo un lugar donde tomar algo, es un punto de encuentro. “Los bares y restaurantes son lugares de convivencia, donde las comunidades locales se reúnen”, destaca Gallego. Prohibir fumar en las terrazas podría erosionar esa esencia, y para muchos propietarios de bares, esto es mucho más preocupante que el impacto económico.
¿Es la prohibición la solución correcta?
Desde Hostelería de España se cuestiona la necesidad de la prohibición. Emilio Gallego subraya que esta no es una demanda social. En países como Suecia y Luxemburgo, donde la medida ya está en vigor, no ha tenido el impacto esperado. Y lo más importante: en el sur de Europa, con un estilo de vida al aire libre y una fuerte cultura de terrazas, la situación es diferente. España no debería seguir el mismo camino sin analizar primero sus propias peculiaridades.
La alternativa: Concienciación, no prohibición
La hostelería no se opone a las políticas antitabaco, pero sí a las medidas que perjudican el negocio. Gallego propone una solución más equilibrada: “Es crucial seguir promoviendo el consumo responsable y la concienciación”. En lugar de prohibiciones drásticas, la educación y la sensibilización pueden ser más efectivas.
Conclusión: El momento es inadecuado
En resumen, Emilio Gallego cree que prohibir fumar en terrazas es una medida innecesaria y perjudicial. En un momento donde la hostelería está recuperándose, esta regulación podría ser un golpe fatal para muchos negocios. Como bien señala: “Hay que mimar a la hostelería, no imponerle más barreras”.
La hostelería es parte esencial del tejido social y económico de España. ¿De verdad queremos que desaparezca esa magia que se vive en nuestras terrazas?