Si tienes una red inalámbrica en el estanco y varios dispositivos que se conectan a través de ella ¡cuidado!, podrías tener un sniffer ojeando. Hoy te contamos cómo evitar posible problemas
Hace algo más de un año, un estanquero que acababa de sufrir un robo nos comentaba cómo le sorprendió que los ladrones supieran exactamente dónde estaba todo: la caja fuerte, el cajón con las llaves del almacén, los sensores… En menos que canta un gallo, se habían llevado todo lo valioso sin andarse con rodeos.
Pero ¿cómo era posible que tuvieran tanta información? La hipótesis más plausible es que los ladrones fueran, también, ciberdelincuentes. Habrían conseguido entrar en la red wifi del estanco y acceder a las cámaras interiores. Con la ayuda de un sniffer, se harían con imágenes de la parte trasera del estanco, la disposición las labores, la ubicación de la caja de seguridad… No se lo podríamos poner más fácil.
¿Qué es un sniffer de red?
A grandes rasgos, es un software capacitado para monitorizar y capturar la información que se transmite e intercambia en una red a la que pueden estar conectados varios dispositivos: el móvil, ordenadores y portátiles, tabletas… También utilizan este medio algunos sistemas de alarma y otros muchos dispositivos con los que trabajamos en un estanco, como los cajones inteligentes o las pantallas led.
Todo un conjunto de dispositivos interconectados a través de una red interna que nos facilita la gestión y resulta muy cómodo a la hora de trabajar. Siempre que lo hagamos con precaución.
¿Cómo evitar posibles problemas?
Es esencial proteger nuestra red wifi para convertirla en una red segura. Ello pasa por configurar el rúter de forma que la red:
- tenga una contraseña robusta
- esté configurada adecuadamente, y
- esté siempre actualizada.
Además, existen medidas adicionales, como desactivar el acceso remoto o la conexión rápida al rúter.
Como veis, no es nada complicado, pero si queréis estar más tranquilos, vuestro servicio informático os puede ayudar a ponerlo todo en orden.
La información robada puede ser muy valiosa, y el remedio para evitarlo no es nada complicado. Manos a la obra y ¡qué no se cuelen en tu estanco!