El contrabando no descansa. Y tú no puedes quedarte mirando. 8 comunidades aumentan su consumo de tabaco ilegal. ¿Está la tuya entre ellas?
Los últimos datos que nos llegan sobre el comercio ilícito de tabaco no son buenos. En 2024, el 6,9% del tabaco consumido en España no ha pagado impuestos. Eso supone un crecimiento del 23% en solo un año.
¿Y las falsificaciones? También han batido récords: ya suponen el 1,8% del total, el dato más alto registrado hasta ahora.
Más trampas, menos ingresos para todos
Este incremento del tabaco ilegal ha supuesto una pérdida de 543 millones de euros en recaudación fiscal.
Casi nada. Un agujero enorme que afecta a los servicios públicos y por supuesto, al comercio legal.
Y no es solo cuestión de números. El tabaco ilegal escapa a cualquier control de calidad. ¿Quién lo fabrica? ¿Dónde? ¿Con qué ingredientes?
Andalucía, epicentro del problema
Si miramos el mapa, Andalucía es la zona más golpeada.
Casi uno de cada cuatro cigarrillos que se fuman allí proviene del mercado negro. En solo seis meses, esta cifra ha crecido más de un 47%.
Ciudades como Algeciras (68,1%), Dos Hermanas (33,4%) o Sevilla (25%) lideran un ranking que nadie querría encabezar.
Y no hablamos solo de consumo: 11 de las 14 fábricas ilegales descubiertas este año estaban en Andalucía.
Un problema que se extiende
El contrabando no se queda solo en el sur. También crece en regiones como Extremadura, Galicia, Valencia o Madrid.
En total, 8 de las 15 Comunidades Autónomas analizadas han registrado un repunte.
Esto no es una tendencia puntual. Es un patrón que se repite y se expande.
¿Qué puedes hacer tú?
Frente al mercado negro, la respuesta no puede ser la resignación. Es una amenaza para todo el sector… y para la legalidad.
Recuerda que existen iniciativas como No Contrabando, donde puedes denunciar puntos de venta ilegales de forma anónima.
Informarse, actuar y compartir la verdad es el primer paso para defender lo que es tuyo: tu negocio, tu reputación… y tu clientela fiel.
La legalidad no se defiende sola. Pero tampoco estás solo para hacerlo.
Porque cada vez que un cliente compra fuera del canal legal, perdemos todos.
Tú, tu negocio, tu barrio… y tu futuro.