Bélgica prohíbe exhibir tabaco en tiendas. ¿Será el primer paso para que otros países europeos adopten medidas similares?
Desde el 1 de abril, las tiendas en Bélgica ya no pueden exhibir cigarrillos ni productos de nicotina.
Una revolución silenciosa que cambia el día a día de fumadores y comerciantes.
Comprar tabaco, ahora una operación discreta
Los clientes ya no pueden ver los paquetes de tabaco a simple vista.
Quien quiera fumar, tendrá que pedirlo directamente al vendedor.
El tabaco sigue estando a la venta, pero oculto tras mostradores, cortinas o sistemas automáticos.
Además, las tiendas de más de 400 metros cuadrados tienen prohibida la venta de estos productos.
Según ha comunicado el Gobierno de Bélgica, la medida busca frenar las compras impulsivas y reducir el consumo de tabaco.
Objetivo: una generación sin humo para 2040
La ambición no deja lugar a dudas: Bélgica quiere que en 2040 haya una generación libre de humo.
Así lo explicó el ministro de Salud, Frank Vandenbroucke, al anunciar la entrada en vigor de la nueva normativa.
La iniciativa refuerza el camino que empezó en enero, cuando se prohibieron los cigarrillos electrónicos desechables, como ya te explicamos aquí.
Cada tienda se las ha ingeniado como ha podido
El gran problema no ha sido cumplir la ley, sino hacerlo sin ayuda.
El gobierno no facilitó materiales ni instrucciones a los comercios.
Algunos han optado por cortinas caseras, otros han invertido en estanterías automáticas.
Todos han tenido que improvisar para adaptarse.
«Nos dejaron solos. Deberían habernos proporcionado el equipo necesario«, lamenta Jenny Van Vaerenbergh, comerciante.
Un cambio que genera más preguntas que respuestas
La falta de apoyo ha generado malestar entre los minoristas.
Muchos se preguntan cómo afectará esto a sus ventas a medio plazo.
¿Será Bélgica el primer país en marcar una nueva tendencia?
¿O quedará como un experimento aislado?
En cualquier caso, el movimiento ya ha empezado… y no tiene pinta de parar.