JUUL ¿el enemigo en casa?

Reflexiones de un estanquero sobre JUUL

Si nuestras opiniones no se escuchan, van a hacer lo que quieran con nosotros.

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Publicamos la interesante y argumentada queja de un estanquero indignado con JUUL y su estrategia contraria a los intereses de nuestro colectivo. Algunos parece que utilicen los estancos porque ya no les queda más remedio. A regañadientes y lo que es más problemático, sin ocultar su firme voluntad de acabar con nuestro negocio básico que es la venta del tabaco. ¿Hasta que punto debemos colaborar con quien nos quiere mal? No podemos negarnos a vender tabaco pero esto claramente no lo es. Ese es el gran interrogante que deja en el aire nuestro compañero, que de manera razonada nos viene a decir que cómo vamos a apoyar y hacer crecer a una marca (por multinacional que sea) que tiene como pretensión manifiesta, clara y diafana, la de acabar el negocio que nos da de comer. Vale la pena leerlo y reflexionar. No son pocos los que ya han puesto sobre la mesa esta contradicción.

El pasado mes de abril publicamos una queja por las declaraciones que el co-fundador de JUUL había realizado en distintos medios de comunicación de alcance nacional y que a nuestro parecer eran totalmente contrarios a los intereses de el mismo sector que párrafos más abajo decía que quiere «utilizar» como canal de introducción de su producto en España. Vaya, no somos los únicos que reivindicamos el derecho a escoger qué productos vender en nuestro estanco.

Os animamos a leer está nueva reflexión de un compañero preocupado por nuestro futuro. Para leer la carta debéis entrar a través de este enlace ya que la publicación llamada «Reflexiones de un estanquero» se ha publicado dentro de la web del Gremio de Cataluña. Debéis marcar sobre el botón «Reflexión» para verla.

A ellos también les felicitamos por haberla publicado. Hay que empezar a tomar conciencia de lo que se avecina. Como no nos pongamos un poco de acuerdo y vayamos un poco a la una, se nos comerán de uno en uno. Primero los más pequeños, las complementarias cierran por doquier, después los medianitos, hay estancos en venta en todas las capitales de España, y al final, sí al final también caerán los grandes. Hay que empezar a reflexionar sobre lo que conviene al sector conjuntamente. Quienes son amigos y quienes no. El sector cambia y con lo que se avecina más vale que estemos unidos y entendamos que hay que apostar por quien apuesta por nosotros.