Si tienes empleados, esto te interesa. La reducción de la jornada laboral a 37,5h ha pasado el primer trámite y podría llegar este mismo año
El Gobierno ha dado el primer paso para reducir la jornada laboral a 37,5 horas semanales y exigir un registro horario digital. Pero calma, porque aún queda camino por recorrer.
Aprobado ayer martes en el Consejo de Ministros
Ayer martes, el Consejo de Ministros aprobó el anteproyecto de ley, pero esto no significa que ya esté en marcha. Todavía necesita la validación del Congreso. Y aquí está el reto: conseguir los votos suficientes para sacarlo adelante. Algo que, como hemos visto últimamente, no siempre es tarea fácil.
¿Cuándo se aplicaría?
Si todo sigue su curso, la reducción de jornada laboral y el control horario digital podría entrar en vigor en diciembre de 2025. El anteproyecto contempla seis meses tras la publicación del texto en el BOE. Es decir, hay margen para adaptarse, pero los estancos deben empezar a prepararse desde ya.
Registro digital obligatorio: adiós a la hoja de papel
Los estancos estarán obligados a llevar un registro de jornada digital e interconectado con la Inspección de Trabajo. Ya no bastará con una hoja firmada al final del mes.
El sistema deberá garantizar:
- Fiabilidad y objetividad, sin posibilidad de alteraciones.
- Accesibilidad, para que los empleados, la Inspección y sus representantes puedan consultarlo en cualquier momento.
- Trazabilidad, para identificar quién y cuándo se han registrado las horas trabajadas.
- Almacenamiento durante cuatro años, siempre disponible en caso de inspección.
Multas de hasta 10.000 euros por empleado
Las sanciones serán más severas. Dependiendo de la gravedad, las multas oscilarán entre 1.000 y 10.000 euros por trabajador si no se cumple con la normativa.
Costes para los estanqueros
Reducir la jornada sin bajar salarios implicará un mayor coste para los empresarios, especialmente para los pequeños negocios con pocos empleados como los estancos.
Algunas opciones para compensar esta reducción podrían ser:
- Contratar más personal, lo que supone un gasto adicional.
- Reorganizar horarios y tareas, para optimizar el tiempo de trabajo.
¿Y ahora qué?
El anteproyecto sigue su trámite en el Congreso y no está garantizado que se apruebe tal como está. La patronal ya ha mostrado su desacuerdo y algunos partidos aún no han confirmado su apoyo.
Por ahora, la clave está en mantenerse informado y prepararse para los cambios que puedan venir. Diciembre de 2025 parece lejano, pero el tiempo vuela. ¡Mejor estar listos!